No importa si apenas comienzas en el running o si eres un corredor experimentado, una de las cuestiones que más confusión generan es la elección del calzado. Hay cientos de modelos allá afuera que emplean docenas de espumas, placas, textiles y cauchos distintos con el objetivo de brindarte la mejor experiencia posible mientras acumulas kilómetros.
En WRP siempre intentamos hacer énfasis en que el mejor calzado es el que te queda bien a ti, no el que usa tu amigo ni el que te recomendó tu compañero de entrenamiento. Dicho lo anterior, hay ciertas pautas que te permiten saber para qué fue creado cada modelo y cómo debería usarse para obtener el máximo beneficio.
En primer lugar, hablemos de los tenis que se están llevando todos los reflectores actualmente: los “supercalzados”. Son aquellos que contienen placa de carbono, una gran cantidad de espuma de última tecnología y una geometría agresiva (la mediasuela tiene forma de mecedora). Están pensados para competencia. ¿Por qué? Porque de acuerdo con los estudios (ver también), a ritmos de 4:37 min x km y menos, es decir 13 km/h y más rápido, la economía de carrera mejora en hasta 4.2% con estos calzados. En pocas palabras: haces más gastando menos energía.
Lo anterior suena muy bien, pero ¿qué pasa si no corres tan rápido como eso? Cuanto más lento corras, menor será el beneficio. Pero, incluso si puedes correr a ese ritmo, no todas tus sesiones deberían ser así de exigentes. El trabajo de baja intensidad también es muy relevante como una forma de desarrollar una base aeróbica. Debe realizarse a un ritmo al que podrías mantener una conversación. A menos que seas un elite, eso significa que estarás corriendo a ritmo de 5:30, 6:00 o 6:30 minutos por km y más. A esos ritmos, utilizar un “supercalzado” con placa de carbono, mucha espuma y una geometría agresiva no es lo ideal.
Aquí es donde entran los tenis para entrenamiento diario o “daily trainers”. Son modelos que ofrecen gran versatilidad. Eso significa que se desempeñan adecuadamente en diferentes tipos de sesiones, desde trotes de zona dos hasta carreras tempo, fartlek o incluso intervalos.
Para recapitular hasta este punto: si estás buscando un calzado de competencia con el que vayas a correr a 4:37 min x km o menos, necesitas un modelo con placa de carbono y geometría de mecedora. Pero si quieres un calzado para entrenamiento diario, esos elementos no son adecuados. En ese caso necesitas un daily trainer. El modelo que nosotros recomendamos dentro de esa categoría es Velocity NITRO 3 de Puma.
Hay un antes y un después en la colección de Puma para running y esto lo marca el lanzamiento de la espuma NITRO. Se llama así porque está infusionada con nitrógeno. En la industria del calzado deportivo es lo que se conoce como una espuma supercrítica. Lo que caracteriza a NITRO es que se trata de un compuesto equilibrado, es decir que es ligero, amortiguado y responsivo. Es por eso que la marca alemana lo ha incluido tanto en los Velocity como en sus hermanos, los Deviate, aquellos más enfocados en sesiones de velocidad.
La tercera versión de Velocity destaca por tener aún más espuma que su predecesora, además de que cuenta con un upper acolchado y estructurado que brinda comodidad sin importar la distancia. Debajo de todo esto está el elemento de caucho PUMAGRIP que ofrece una tracción adecuada en diferentes superficies, algo que es clave para entrenar con confianza y animarse con cambios de dirección y de ritmo incluso cuando está lloviendo.
así fue la experiencia velocity nitro 3
Estos tenis nos gustan porque son amigables prácticamente con cualquiera, desde el que da sus primeros pasos en el mundo del running hasta aquel que está entrenando para un maratón. Pero para mostrar que no es nada más nuestra impresión, invitamos a 40 personas a que conocieran más de cerca el calzado y lo pusieran a prueba mediante cuatro actividades distintas diseñadas para valorar las siguientes características:
- 1. Retorno de energía/propulsión
- 2. Amortiguación
- 3. Agarre de la suela
- 4. Comodidad
La forma en que esto funcionó fue la siguiente: dividimos a los participantes en cuatro equipos y diseñamos distintas rutas que tendrían que recorrer a manera de rally en la colonia Polanco. En cada una de las estaciones a las que llegaron, realizaron una prueba física diseñada con alguno de los puntos mencionados antes en mente. Por ejemplo, en el Circuito Gandhi, hicieron sprints junto a un radar que revelaba la velocidad alcanzada; en el gimnasio Libra x Libra superaron una prueba de agilidad que requería tanto reflejos de parte del atleta como tracción de parte del calzado.
En total, los participantes recorrieron entre 11 y 12 km, se esforzaron, sudaron, compartieron con personas afines y comprendieron mejor qué es lo que hace a un buen calzado para correr. Al final de la experiencia, tuvieron la oportunidad de hacerse de los nuevos Velocity NITRO 3 y utilizarlos para alcanzar sus objetivos, ya sea que sólo quieran correr unos minutos para cuidar su salud o bajar de tres horas en 42K. Versatilidad es el nombre del juego.
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