El cuerpo es una máquina muy compleja y la mayoría ignoramos todos los procesos que tienen lugar en su interior. Con esto en mente, hay ideas que superficialmente resultan muy atractivas (particularmente cuando alguien hace un esfuerzo por vendérnoslas), aunque no tengan una aplicación real. Es el caso de las dietas “detox”. Comer algo que te desintoxique suena bien, ¿cierto? Pero la realidad es que el cuerpo no funciona así. Te explicamos por qué.
¿Qué son las dietas “detox”?
De acuerdo con sus promotores, las dietas “detox” son regímenes alimenticios cuya aplicación ayuda al organismo a eliminar las toxinas que lo ponen en riesgo. Estas dietas son de naturaleza muy restrictiva. Algunas consisten en consumir únicamente jugos durante un lapso dado. Es común que se comercialicen dichos jugos bajo el concepto de “juice cleanse”.
Un ejemplo es la dieta conocida como Master Cleanse, creada en los años 40 y popular entre celebridades. Tiene una duración de 10 días y, según dicen sus defensores, ayuda a eliminar toxinas, perder peso y eliminar síntomas de enfermedades.
¿Funcionan las dietas “detox”?
No existen investigaciones serias que respalden el uso de dietas “detox”, ni como una manera de desintoxicar al cuerpo ni como una estrategia para perder peso. En cuanto al primer punto, hay que mencionar que el cuerpo cuenta con un órgano diseñado específicamente para eliminar toxinas. Se trata del hígado. No hay necesidad de someter al cuerpo a una desintoxicación, ya que este la lleva a cabo de forma natural.
En cuanto a la pérdida de peso, otra de las razones por las que algunas personas prueban con dietas “detox”, hay que dejar claro que no es lo mismo perder peso a secas que hacerlo de manera saludable y sostenible. La pérdida de peso es producto de algo que se conoce como déficit calórico. En pocas palabras implica que cuando consumimos menos calorías que las que quemamos, perderemos peso.
Dado que las dietas “detox” se componen de una cantidad muy limitada de calorías, el sujeto pierde peso rápidamente. Pero, como explica Harvard Medical School, “mucho del peso perdido es el resultado de la pérdida de fluidos relacionada con el contenido extremadamente bajo de carbohidratos y las frecuentes deposiciones o diarrea producidas por el agua con sal y los tés laxantes”.
Hay muchos problemas con esto. Entre ellos está el hecho de que cuando se sigue una dieta extrema, la tasa metabólica basal se reduce. Esto es la cantidad de calorías que el cuerpo quema para llevar a cabo sus funciones. En otras palabras: si el cuerpo recibe muy poca energía, gasta muy poca energía también y esto evita que haya un déficit sostenible. Por otro lado, un consumo tan bajo de calorías trae consigo cansancio y una reducción del rendimiento físico.
Finalmente, una vez que el sujeto deja la dieta y comienza a comer de forma normal, el peso regresa rápidamente.
¿Por qué algunas personas se sienten bien con las dietas “detox”?
¿Todo lo anterior significa que las dietas “detox” no tienen ningún efecto positivo? No necesariamente. Algunas personas dejarán de consumir alcohol, productos procesados o alimentos que les generan malestar al seguir una dieta “detox”. Como resultado, podrían comenzar a sentirse mejor. El asunto es que no se precisa una dieta restrictiva y riesgosa para reducir o eliminar el consumo de aquellas cosas que sabemos que no son buenas para nosotros.
Si quieres nuestro consejo: toma el dinero que gastarías en tu dieta “detox” y utilízalo para acudir con una nutrióloga que te ayude a diseñar un plan alimenticio que te permita alcanzar tus objetivos de composición corporal sin ponerte en riesgo.
¿Qué dice la ciencia sobre las dietas “detox”?
De acuerdo con un estudio publicado en Journal of Human Nutrition and Dietetics por científicos australianos, simplemente no se han presentado evidencias de que este tipo de dietas logren lo que prometen sus defensores. “Hasta donde sabemos”, dicen los científicos, “no se han realizado ensayos controlados aleatorios para determinar la efectividad de las dietas detox comerciales en humanos”.
¿Por qué, entonces, se presentan estas dietas como si quienes las crean tuvieran la certeza de que funcionan? Porque es una idea que vende. ¿Deberías probar una dieta detox? La decisión es tuya, pero no ofrecen nada positivo que no puedas obtener simplemente consumiendo alimentos saludables y hay riesgos asociados con ellas que deberías tener en mente.