Cada año, las grandes marcas de sportswear (Nike, adidas, Under Armour, Puma, Asics, Reebok, etc.) invierten enormes cantidades de tiempo, dinero y esfuerzo en investigación y desarrollo de materiales e ingeniería con un solo objetivo en mente: hacerte un mejor atleta, no importa si eres un principiante o si compites al más alto nivel.
Si no eres una persona que siga de cerca este tema podrías pensar que se trata de una exageración, ¿qué diferencia hace, en realidad, usar tal prenda o tal calzado? Cada una de las marcas mencionadas arriba te responderá de forma distinta, empleando los términos específicos que usan para sus tecnologías (ZoomX, React, Dri-FIT, Therma-FIT, FyteFoam, AHAR, Boost, Climachill, Continental, HOVR, Iso-Chill, ColdGear, Floatride, PROFOAM LITE, HYBRID) y si bien hay una gran labor de marketing detrás de esos trabalenguas, la realidad es que sí generan un impacto. Lo explicamos.
No hay espacio suficiente para abordar a detalle todos los beneficios que brindan las tecnologías mencionadas más arriba (y los cientos más que existen), pero una forma sencilla de entender cómo te impactan es pensar en términos de los problemas que buscan resolver y cómo eso puede hacerte un mejor atleta.
Calzado
Protección y durabilidad
Dado que la inmensa mayoría de nosotros no estamos acostumbrados a correr descalzos, y solemos entrenar en superficies que nos lastimarían los pies si lo hiciéramos (pavimento, grava, tartán), necesitamos tenis que nos protejan y que tengan la mayor durabilidad posible. Ese es el primer elemento.
Tecnologías enfocadas específicamente en esto: Continental de adidas; AHAR de Asics
Amortiguación
Por otro lado, tomando en cuenta que correr es un ejercicio repetitivo que genera un impacto en las articulaciones, específicamente en las rodillas, requerimos materiales que amortigüen ese impacto, de manera que la afectación sea menor. Cuanto mayor sea nuestro peso corporal, más importante será contar con esta protección. Ese es el segundo elemento.
Tecnologías enfocadas específicamente en esto: React de Nike; FlyteFoam de Asics; Boost de adidas; HOVR de Under Armour; Floatride de Reebok: HYBRID de Puma
Ligereza
Todos queremos ser veloces y la clave para lograrlo es tener una buena relación entre peso y potencia. Llevar un chaleco lastrado te hará más lento, ¿cierto? En una proporción menor pero lo mismo ocurrirá si llevas tenis pesados, cualquier material que sobre se convierte en un lastre.
Tecnologías enfocadas específicamente en esto: PROFOAM LITE de Puma; ZoomX de Nike
Prendas
Transpirabilidad
¿Sabes por qué los humanos podemos correr mayores distancias que cualquier otra especie? Porque podemos sudar (aquí lo explicamos más a detalle). Algunas personas sudan más y otras menos, pero todos transpiramos mientras hacemos ejercicio. Los materiales que absorben esta humedad, como el algodón, se vuelven pesados, lo cual incomoda y, peor aún, promueve la fricción y esto da lugar a rozaduras.
Tecnologías enfocadas específicamente en esto: Dri-FIT de Nike; Climachill de adidas; Iso-Chill de Under Armour
Protección ante bajas temperaturas
Dicen que los cuerpos de verano se hacen en el invierno, eso significa que el frío no puede ser un pretexto para ponerle freno al entrenamiento. Si vas a correr o hacer funcional en exteriores, una playera básica no basta, y usar una chamarra casual podría hacerte sudar demasiado, sudor que cuando dejes de moverte hará que te congeles. Necesitas prendas que mantengan la temperatura de tu cuerpo sin que ésta se eleve demasiado.
Tecnologías enfocadas específicamente en esto: ColdGear de Under Armour; THERMA FIT de Nike
Estos son sólo algunos ejemplos de situaciones que tienen el potencial de mermar tu rendimiento y opciones que brindan las marcas para evitar que esto suceda. Evidentemente, hay muchas más opciones y todas las marcas tienen tecnologías para cada problema, pero estas son algunas de las más relevantes.
La dimensión psicológica del rendimiento
Más allá del impacto mecánico o material que tienen las prendas y calzados en nuestro desempeño hay un factor psicológico que no puede menospreciarse. En un estudio publicado en Journal of Experimental Social Psychology, los investigadores Hajo Adam, Ph.D. y Adam D. Galinsky Ph.D. de Northwestern University presentaron el término “enclothed cognition”, el cual describe la influencia que tiene la ropa en los procesos psicológicos del usuario.
En su experimento, los investigadores evaluaron los efectos de usar una bata blanca de laboratorio comparado con no usarla en tareas que requieren concentración. Todos asociamos este elemento con cualidades como atención al detalle y precisión, ¿cierto? Lo que encontraron es que portarla mejora el rendimiento dichas tareas. Adicionalmente, encontraron una diferencia entre una bata descrita como de pintor y una perteneciente a un doctor. ¿La conclusión? El rendimiento podría verse afectado por el significado simbólico del elemento y por la experiencia física de portarlo.
Traslademos este principio a otro ejemplo cotidiano. Digamos que debes dar un discurso en un evento formal. ¿Qué tan bien crees que lo harás si estás enfundado en un elegante traje a la medida a comparación de una playera y unos jeans? Hay un elemento de confianza que proviene de las prendas, independientemente de sus materiales.
Ahora vayamos al ámbito del deporte. Estás en la línea de arranque de un maratón, a punto de iniciar un WOD en una competencia de CrossFit o entrando a la cancha para un partido de futbol. Utilizar prendas diseñadas específicamente para cada una de esas disciplinas te permitirá tomar ventaja primero del aspecto tecnológico que comentamos al comienzo y en segundo lugar del simbólico. El resto depende sólo de ti y de tu entrenamiento.
En resumen
Utilizar prendas y calzado adecuados para la tarea que vas a realizar tiene un impacto directo en el rendimiento por medio de dos mecanismos: el primero es la tecnología desarrollada por las marcas para evitar incomodidad, molestias o lesiones, y el segundo es el efecto simbólico de portar algo asociado con capacidad y maestría. Si lo que buscas es ser un mejor atleta no puedes subestimar el aspecto tecnológico ni el psicológico.
